O uno o lo otro

Monólogo de un idiota XXI

Nunca antes había presenciado la muerte.
Vino callada, sin campanas, me quitó una ilusión. En realidad, ni siquiera sabía su nombre. Su marido debe estar a las puteadas, se me ocurre. Los hijos, si tiene, no deben entender nada. Ojalá podría estar presente para explicarles que a su madre la atropelló un camión luego de salir de un telo, a las 6:16 am, en manos de un naufrago.
Y que se le vazer, como decía el kioskero hoy, al mencionar que la inseguridad está subiendo, y la basura en la calles, también.
Que se le vazer, si estoy en un escritorio, junto a una pila de entregas, atascado y atrasado en mi dios del tiempo, con ojos que solo cierran, que se niegan a enfrentar mi realidad matutina.
Así como sopló el viento, muerde el alfil.
Me encuentro confundido entre peón y torre.

Comments

Zoe said…
¡Y desaparecí de nuevo!
creo que debería dedicarme a los actos de magia en vez de a las leyes...

Pero sea lo que sea, es un gusto volver a aparecer de nuevo cuando tan excelentes letras me esperan de este lado.
Cai, cada día que pasa mejora usted más. Ya de eso no me cabe duda.

le mando un abrazo enorme y mis saludos desde la Clínica.

Popular posts from this blog

y bueno

Imperfecto

En una plaza venida abajo